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MI HISTORIA MUSICAL: 00 - EN EL PRINCIPIO ERA LA BICICLETA.

 

MI HISTORIA MUSICAL: EL COMIENZO.

Corría el año de vuestro señor de 2016, septiembre para más señas, cuando se me ocurrió hacer El Camino de Santiago en bicicleta desde Plasencia, yo solo con un par. En el albergue de Zamora había colgada una guitarra en la pared y no se me ocurrió otra cosa que ponerme a enredar con ella. Solamente había otro español, toda la gente allí presente eran de otras nacionalidades, me puse a tocar "Maruja Limón" y me aplaudían como si fuese Frank Sinatra, un señor francés nos había hecho la cena para todo el mundo, había acompañado a un canadiense a la farmacia y había conocido a unas chicas rusas y todo eso aderezado con un par de Mahous (no es por hacer publicidad) en lata, me había hecho venirme arriba. Después de tan esplendoroso concierto, en el que toque alguna joya patria más como Caramba carambita o Esa rumba tan flamenca, me fui a dormir y lo que aconteció allí en esa cama con sábanas de quita y pon y un saco de dormir recién comprado en el Carrefour de Zamora es el inicio de lo que hoy se conoce como Coronado Smith. Soñé con una canción preciosa, la mejor canción que había escuchado jamás, obviamente cuando volví a Plasencia, me puse a intentar componer para ver si salía, harto inútil, pues ninguna se parecía a esa canción. Ni que decir tiene que todo lo que tenía guardado (bien guardado) de ahí para atrás fue inmediatamente desechado (salvo algunos retazos que más adelante diré cuales son), por tanto del 2016 hacía atrás solo conservo ideas y un par de canciones o tres, muy, pero que muy punkarras. Me propuse componer 33 canciones -no me preguntéis el por qué de esa cifra- convencido de que entre esas 33 iba a estar la canción que había soñado aquella noche mágica en Zamora, huelga decir que todavía la sigo buscando, pero de entre ellas salió la número 25, Canta sirena, canta, en la que encontré algunas similitudes y que fue la que me hizo espetarme en el estudio de grabación sin tener ni puñetera idea de lo que iba el asunto. En esa mi primera sesión de estudio en enero de 2017, ¡qué cariño le tengo!, hice tres canciones: Crea tu fantasía (en acústico puro, mi guitarra y yo), Canta sirena canta (guitarra acústica, bajo y batería) y Conversación con el diablo (rock duro con banda), y además me llevé la primera bronca y el primer despertar. Las canciones las llevaba sin estructurar, sin metronomar y sin ningún tipo de referencia sonora establecida, el batería (son muy especialitos todo hay que decirlo) se subía por las paredes, pero como era un tío bastante majo (y lo sigue siendo) sacó las canciones adelante, a pesar del caos que eran y a partir de ahí..., bueno no de ahí, sino de la siguiente que las llevé peor todavía y la bronca fue más grande, pues fue a dúo, me di cuenta lo atrevida que era la ignorancia y me tuve que poner las pilas.




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